Pez pene

Existe y se lo comen

Una asombrosa maravilla de la naturaleza fue avistada hace poco en una concurrida playa nudista, donde se produjo un encallamiento masivo. Se trata de una forma de pene marino que ha sido denominado “pez pene” y que no fue un atributo masculino deambulando por la playa, sino una rara especie animal que se cree que fue la que inspiró a Lilith para que le sugiriera a su creador cómo dotar a su contraparte (véase La precuela bíblica para saber más sobre Lilith).

Irónicamente, le asignaron el nombre científico de Urechis capo, pero se sabe de la existencia de algunos géneros atrofiados de dicha especie como el Urechis chitus y de otros más desarrollados, como los géneros Urechis monstruosus y Urechis arrechis muy apetecidos en ciertos entornos.Esta delicada criatura alcanza hasta veinticinco centímetros de largo en estado de reposo, busca anidar en lugares húmedos y cálidos, donde le gusta mucho retozar hasta cuando se vuelve blando y corto y entonces, exhausto, aflora a la superficie.

Se sabe que prefiere vivir enterrado, en la arena de la playa, donde alcanza su máximo tamaño y grosor, con todo su esplendor, pues sus delicadas capas de músculo retráctil se mantienen rígidas y firmes, lo cual sucede durante períodos cortos que se repiten a ciertos intervalos, dependiendo de lo que logre conseguir para mantenerse vivo en el ambiente donde se encuentre, pero, esencialmente, de su edad.

Pese a la novedad de su aparición en la playa mencionada, este animalito es conocido desde mucho atrás en las milenarias culturas orientales (claro, dónde más), no solo por su textura, firme pero suave, su apariencia rosácea y sus movimientos espasmódicos, sino porque posee, según quienes conocen del tema, un equilibrado sabor entre dulce y salado, gracias a su gran cantidad de aminoácidos. Es común que se le consuma crudo en las gastronomías de prácticamente todas las culturas, aunque en cada país hay diferentes formas de degustarlo.

Esta particular criatura, si es manipulada de la forma adecuada (por ejemplo, succionada o frotada repetidamente), llega a expeler cierta cantidad de líquidos que son del agrado de muchas personas en diversas partes. Si se le adicionan ciertos aceites, fragancias o esencias, se le valora mucho más.

Pero su uso no es exclusivamente culinario, sino que es muy popular su uso medicinal para curar malestares como la migraña, el mal humor (conocido como cara de cólico), el mal de vereda (también conocido como verano prolongado) y la parálisis sentimental (que es la que se produce cuando no se encuentra con quién ni en dónde).

Una característica sorprendente es que este animalito se vuelve erecto, él solito por frotación, por lo cual se le considera un excelente afrodisiaco, un remedio infalible para combatir la disfunción eréctil (en La disyunción eréctil hemos explicado esta patología) y el aburrimiento sexual, tanto de los hombres como de las mujeres.

Un grupo de científicas de la Universidad de Eritrea ha planteado la hipótesis de que, a diferencia de la mujer, el hombre pudo haber evolucionado a partir del gusano ese con apariencia de pez, lo que posiblemente explicaría el porqué de la conducta sexual masculina y cómo gran parte de sus comportamientos obedecen a los estímulos provenientes de esa parte de su anatomía. Ya están trabajando en demostrarlo.